

EL CORCEL DE COLORES Y EL ABUELO BALTAZAR
En El corcel de colores y el abuelo Baltazar, la relación amical hombre-animal es el punto de partida para que Josué Vallejos Vásquez elabore un excelente relato en el cual se conjugan las aventuras de los protagonistas: El caballo llamado Argentino y su propietario don Baltazar, anciano labriego.
Argentino es un caballo singular no tan sólo en su apariencia física (su pelambre es multicolor), sino también en su comportamiento, el cual se presenta actitudes humanizadas (presenta actitudes que al parecer fueran propias del hombre) sobresaliendo entre ellas el sentimiento de la amistad.
Hombre y bestia aparecen ligados por un fuerte lazo amical que se hace más patente y sublime en dos momentos de la narración: La recuperación del Argentino que había sido raptado por los miembros del ejército y cuando en la agonía y muerte de don Baltazar, el animal aparece como único testigo de tan aciago hecho.
Si la historia de esa amistad es relevante, también lo son los diversos escenarios en los cuales se desarrolla. Así, paisajes y naturaleza toda aparecen llenos de vitalidad y colorido. De esta forma lo narrativo y lo descriptivo se mezclan armoniosamente dando como resultado un bien logrado texto literario.

Si un hombre cualquiera, incuso vulgar, supiera narrar su propia vida, escribiría una de las más grandes novelas que jamás se haya escrito.
Giovanni Papini
El arte y la Literatura son la emanación moral de la civilización, la espiritual erradicación de los pueblos.
Giosue Carducci
